Al campeón le costó mucho, pero acabó resolviendo el primer partido de LaLiga en casa, en un Montjuïc que de momento está costando llenar. Fue necesaria mucha paciencia para acabar encontrando un resquicio en la defensa de un muy solvente Cádiz. Una gran acción entre Gündogan y Pedri supuso el 1-0 a menos de diez minutos para el noventa y Ferran, que saca petróleo de los minutos que tiene, apuntilló. El Barça obtuvo premio a su paciencia.

Los minutos iban pasando en el Olímpic de Montjuïc y comenzaban a pesar cada vez más en las piernas de los jugadores azulgranas conforme no llegaba el primer gol de la temporada. El Cádiz, bien plantado en el campo, cerró filas sin renunciar a atacar en cuanto veía la ocasión, sin descomponer el bloque. El Barcelona tuvo que picar mucha piedra y, aun así, sufrir después del 1-0.

Para empezar, golpe de efecto. Había mucho debate sobre el elegido para ocupar el sitio de Raphinha, sancionado, y cómo se resolvería la ausencia por lesión de Araujo. Lamine Yamal fue la sorpresa en una alineación con Frenkie de Jong como central izquierdo, desplazando a Koundé otra vez al lateral. Es decir, un 4-3-3 en el que el neerleandés ayudaba en ataque en la creación y se replegaba en defensa. Xavi, que lo presenció desde lo más alto de la Tribuna de Montjuïc al estar sancionado, buscó explotar la capacidad de desequlibrio de la sensación de la pretemporada.

Inicialmente costó resquebrajar la sólida barrera cadista, pero no iba muy desencaminado el técnico. De las botas del jovencísimo extremo nacieron las mejores ocasiones del Barcelona en el primer tiempo, en un escenario de partido que requería desborde para abrir esa defensa que no dejaba espacios, sin que el equipo amarillo renunciase a buscar la portería de Ter Stegen, a diferencia de la cochambre futbolística que había dispuesto el Getafe.

No faltaron las incorporaciones de Balde por la izquierda, como reflejo de las diabluras de Lamine por el otro lado. Balde dio mucho trabajo a Iván Alejo, si bien en defensa perdió el balón que supuso la mejor ocasión de un Cádiz que se defendía sin renunciar a plantarse como bloque en el área de Ter Stegen: una pérdida del lateral dejó a Roger solo ante Ter Stegen tras recorrer medio campo. El meta aguantó y ganó el uno contra uno al desviar el balón. Fue la mejor ocasión de los visitantes.

Insistía el Barça, pero sin lograr descomponer el orden del Cádiz. Oriol Romeu chutó desde lejos y Koundé probó a Ledesma al resolver un embrollo en el área tras un córner. El meta volvió a atrapar un cabezazo de Pedri tras centro de Yamal y en otra ocasión fue Lewandowski quien cabeceó a las manos del meta tras balón al área de Frenkie.

Sin duda, la mejor ocasión la creó Lamine, que obligó a Ledesma a desviar con la onta de los dedor un chut muy ajustado tras ganar la disputa de un balón en el área cadista tras una prolongación de Lewandowski. El meta cadista completó un gran primer tiempo cuando desvió un remate de Koundé a centro de Pedri después de una gran acción colectiva de todo el equipo iniciada desde la propia portería por Ter Stegen.

Tan volcado sobre la meta del Cádiz estaba en ataque el Barcelona en la segunda parte que Chris Ramos volvió a tener una contra, prácticamente una situación de uno contra uno con Balde mientras el Barcelona se replegaba. El remate final de Alcaraz salió fuera, poco antes de que Gavi mandase un remate a la madera en ese inicio de segundo tiempo.

EL CÁDIZ LA VUELVE A TENER

El Cádiz volvió a tener el primer gol en una acción de Chris Ramos, que chutó desviado después de sentar a Christensen, con Frenkie y Balde pasivos en el apoyo al danés. Llegaron los cambios y entraron Abde para ubicarse como extremo izquierdo y Ansu como segundo delantero, por Balde y Gavi.

Sin pensárselo, Abde controló en el borde del área y lanzó un chut potentísimo que obligó a Ledesma a lucirse otra vez en la carga final del Barcelona. Y, con el Cádiz encerrado, un pase de Gündogan tras recibir de Pedri encontró en el área al canario. Talento para fabricar un resquicio en la defensa amarilla. A partir de ahí, control del Barça y gol anulado por fuera de juego de Lewandowski al recibir, antes de darla a Ansu. La tranquilidad la puso Ferran con el segundo gol, a pase de cabeza de Lewandowski, con el Cádiz volcado en busca del empate.

FC BARCELONA: Ter Stegen (3); Koundé (2), Christensen (0) (Eric Garcia (1), 78’), Frenkie de Jong (2), Balde (1) (Ansu Fati (1), 67’); Gavi (1) (Abde (2), 67’), Oriol Romeu (2) (Sergi Roberto (1), 78’) Gündogan (2); Lamine Yamal (3) (Ferran (3), 86’), Lewandowski (0), Pedri (3)

CÁDIZ CF: Conan Ledesma (3); Iza (1), Luis Hernández (2), Fali (2), Javi Hernández (0); Iván Alejo (1) (Machís (1), 67’), Alcaraz (2), San Emeterio (1) (Sobrino (1), 47’), Alex Fernández (1) (José Mari (1), 85’); Chris Ramos (2) (Negredo (1), 85’), Roger Martí (0) (Osmajic (1), 85’)

GOLES: 1-0, Pedri, 82’; 2-0, Ferran, 90’+5

ÁRBITRO: Muñiz Ruiz (Comité Gallego) (1). Tarjetas a Iván Alejo (13’), Frenkie de Jong (25’), Ter Stegen (26’), San Emeterio (45’), Gavi (45’+5), Pedri (72’), Javi Hernández (45’+3)

ESTADIO: Estadi Olímpic Lluís Companys. 39.603 espectadores

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO