La ciudad de Guayaquil se encuentra con el clima de la final de la Copa Libertadores entre Flamengo y Atlético Paranaense, pero en Río de Janeiro un nutrido grupo de hinchas del ‘Fla’ están viviendo un calvario.

Esto debido a los problemas que ha tenido un operador de viajes con los itinerarios de muchos aficionados que están viendo como sus vuelos han sido cancelados o reprogramados a pocas horas de la final en Guayaquil.

El periodista Vene Casagrande relató la historia de un padre que pagó 25 mil reales brasileños (unos 4690 dólares aproximadamente) para que él y su hijo puedan viajar. Al ver que su hijo no podía volar, decidieron quedarse terminando en llanto en la terminal aérea.