Sergio Ramos, que mañana cumple 36 años, vuelve a estar a punto. O eso parece, aunque nadie en el PSG quiere pecar de optimista. El central ha hecho recientemente algunos entrenamientos a buen ritmo y la intención es que pueda entrar en la lista de Pochettino para el partido del fin de semana contra el Lorient. Dos meses después de lesionarse, el ex del Real Madrid quiere dar la cara y acabar la temporada sobre el terreno de juego.

Sergio Ramos tiene otro año firmado de contrato en París, pero no está claro que lo vaya a cumplir. Habrá que esperar a junio. Su historial hasta ahora en el PSG habla por sí mismo. Constantemente apartado del grupo por culpa de sus problemas musculares, ha habido gente en el club que ha reconocido que contratarle fue un error. El propio Leonardo, en una entrevista de hace unos meses en L’Équipe, entonó con buenas palabras el mea culpa al decir que pudo haberse equivocado con esta operación.

Sergio Ramos ha jugado solo cinco ratos desde que llegó al PSG. Ni siquiera ha debutado en Champions. La eliminación contra el Real Madrid la tuvo que presenciar desde la grada, impotente ante la falta de respuesta de sus compañeros en el Santiago Bernabéu, la que fue su casa hasta hace pocos meses. Él quiere otra oportunidad. Su familia se ha adaptado a la vida en la ciudad y Sergio Ramos cree que aún tiene condiciones para estar en la élite.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO