Sadio Mané fue la gran figura del compromiso entre el Southampton y Manchester City. El resultado fue 4-2 y Mané se encargó de marcar tres de los cuatro goles.

La anécdota se dio al final del partido cuando el africano se llevó el balón por el hat-trick que había anotado, pero el juez central le jugó una broma y se lo impidió. Al final, todo terminó en risas.


Nota de: Víctor Loor Bonilla