El Bayern volvió a ser víctima de un vergonzoso arbitraje en el Bernabéuen poco más de un año, algo que pasará a los anales de la historia de la Copa de Europa. Este martes, Cüneyt Çakir favoreció descaradamente a los blancos al no pitar una clara mano de Marcelo, con 1-1 al borde del descanso.

El turco tampoco quiso saber nada de dos posibles penaltis de Sergio Ramos sobre Lewandowski, uno en el minuto 17 y otro en el 52’, que provocaron rabia e indignación en las filas germanas, como sucedió el 18 de abril de 2017, cuando el colegiado Viktor Kassai también perjudicó gravemente al Bayern en el Bernabéu. El húngaro le perdonó la roja a Casemiro y expulsó de forma injusta en el 84’ por doble amarilla a Arturo Vidal, con 1-2 antes de la prórroga, donde dio validez a dos goles de Cristiano en fuera de juego (2-2 y 3-2). El presidente del Consejo Directivo del Bayern, Karl Heinz Rummenigge dijo tras aquel bochornoso arbitraje que “lo del árbitro en el Bernabéu no se había visto en 40 años”.

Este martes, Çakir fue el que ayudó al Real Madrid a meterse en la final del próximo 26 de mayo en Kiev con sus erróneas decisiones. El turco ya salvó a los blancos en unos octavos de final de la Champions 2012-13, cuando expulsó injustamente a Nani y facilitó la remontada merengue. Con el choque casi finalizado, Evra fue trabado claramente dentro del área por Sergio Ramos, pero Çakir volvió a mirar hacia otro lado.