La selección de Paraguay finalizó el año 2024 con una destacada actuación en las Eliminatorias Sudamericanas rumbo a la Copa del Mundo 2026. Bajo la dirección técnica de Gustavo Alfaro, la Albirroja no solo mantiene su invicto, sino que se consolida en la zona de clasificación directa al Mundial, generando esperanza en un país que sueña con volver a la máxima cita del fútbol.
El combinado guaraní cerró el año rescatando un valioso e histórico empate 2-2 ante Bolivia en los 4.150 metros de altura de la ciudad de El Alto. En un partido cargado de emociones, Miguel Almirón y Julio Enciso se lucieron con dos golazos que marcaron el ritmo del encuentro.
Cuando todo parecía perdido, Julio Enciso, jugador del Brighton, anotó un gol agónico en los instantes finales, sellando el empate para los paraguayos. Este resultado no solo extendió el invicto de la era Gustavo Alfaro, sino que ratificó el buen momento del equipo, que sigue mostrando solidez y determinación para alcanzar su objetivo mundialista.
La llegada de Gustavo Alfaro ha marcado un antes y un después para Paraguay, considerado el mejor acontecimiento para el combinado guaraní desde la etapa de Gerardo Martino. Tras tres eliminaciones consecutivas al Mundial y la humillante participación en la Copa América 2024 bajo la dirección de Daniel Garnero, la selección parecía estancada y sin rumbo. Sin embargo, Alfaro revitalizó al equipo, resucitó su ADN competitivo y afrontó con valentía los retos que parecían inalcanzables.
En tan solo seis partidos, el estratega argentino logró lo impensado: mantener el invicto, vencer a dos campeones del mundo y sumar puntos en la temible altura de Bolivia. Este resurgir ha devuelto la confianza tanto a los jugadores como a la afición paraguaya, que ahora sueña con regresar al certamen más importante del fútbol mundial, una hazaña que no consiguen desde Sudáfrica 2010.
La Albirroja cierra el año con optimismo y convencida de que su camino bajo el liderazgo de Alfaro está allanando el regreso de Paraguay a los primeros planos del fútbol internacional.
Nota de Alvaro Ayala