El mundo del fútbol, siempre cambiante, está lleno de situaciones que sus protagonistas querrían borrar de la historia. Este es el caso, con toda seguridad, que protagonizan Mikel Arteta, entrenador del Arsenal, y Mauricio Pochettino, su homólogo en el Chelsea, que este fin de semana medirán sus fuerzas en la Premier League.

En concreto, sería el argentino quien desearía borrar el capítulo que ha desvelado Arteta este viernes. Tras calificar a Pochettino, con quien coincidió como jugador en el París Saint-Germain, como «una de las personas que más han influido en mi carrera», ha explicado el increíble consejo que este le dio en su momento.

«Siempre le estaré agradecido por lo que hizo por mí en París, cuando me acogió como si fuera su hermano pequeño durante los tres meses que convivimos en un hotel. Desde entonces se convirtió en un modelo a seguir«, ha explicado.

Pero no siempre siguió sus consejos. Concretamente el que le dio un día con estas palabras: «No te hagas nunca entrenador, ¡es demasiado duro!’, me dijo un día. Yo ya sabía que acabaría convirtiéndome en entrenador, pese a todo…», ha añadido entre risas el vasco.

Por su parte, Pochettino ha dicho que «no me sorprende ver a Mikel triunfando desde un banquillo: a los 17 años ya tenía alma de entrenador. Y todavía es muy joven: puede convertirse en uno de los mejores entrenadores de la historia».

«Se me hará extraño enfrentarme a él, pero en este mundo hay que ser muy competitivo: queremos ganar y destruir al adversario. Será raro pero será un orgullo verle en el banquillo del Arsenal», ha concluido Pochettino.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO