Argentina vive horas de locura antes de su reencuentro con los campeones del mundo. Al otro lado de la cordillera, la expectación es alta por la llegada de la selección para sus dos amistosos de marzo, en los que enfrentará a Panamá en Buenos Aires y Curazao en Santiago del Estero.

Los seleccionados trasandinos ya vivieron un primer entrenamiento en Ezeiza y, tras eso, uno de ellos vivió una noche tremendamente especial. Fue Lionel Messi, quien fue rodeado por una inmensa multitud cuando fue a comer a un restaurante de la capital argentina.

Durante la noche de este lunes, el campeón de Qatar 2022 asistió junto a su familia la parrilla Don Julio, donde intentó mantener un bajo perfil. Lo que no esperaba era que cientos de fanáticos asistieran corriendo al lugar al saber de su presencia ni menos que se instalaran fuera del local por horas.

Tampoco que su salida fuera tan caótica. La Pulga arribó cerca de las 23:00 horas a la parrilla ubicada en el barrio de Palermo y recién a las 2:00 horas probó suerte para poder dejar el lugar. Acompañado de la policía, enfrentó a cientos de aficionados que se lanzaron sobre él.

Cruzando un mar de hinchas que le tomaron fotografías, lo grabaron, abrazaron e incluso acariciaron su rostro, Messi logró llegar hasta el auto que lo esperaba. La locura no se detuvo ahí, pues varios fanáticos siguieron el vehículo por algunas cuadras. Messi, por su lado, mantuvo siempre una sonrisa.

Para seguir celebrando junto a su gente, Messi y el resto de la selección Argentina se reencontrarán con el público este jueves 23 de marzo en el Estadio Monumental, donde enfrentarán a Panamá. Tres días después lo harán en el Estadio Único Madre de Ciudades, donde chocarán con Curazao.

TOMADO DE REDGOL