Hay situaciones en el fútbol que generan una conmoción inexplicable y sorprenden en distintas partes del mundo. El caso de Robert Peric-Komsic es un claro ejemplo de esto ya que el delantero bosnio decidió alejarse del fútbol para poder salvarle la vida a su mamá.

El 2022 arrancó con una complicada situación para el delantero del HNK Cibalia Vinkovci de la Segunda División de Croacia. Su madre estaba en un complejo momento de salud que durante 13 años le generó un calvario y él no dudó en hacer lo necesario para poder ayudarla. Fue en marzo que decidió viajar a Estambul y se sometió a una cirugía donde le extirparon el 70% del hígado para poder trasplantárselo a Ljiljana.

En aquel momento los médicos habían diagnosticado que sólo quienes estaban en el núcleo más cercano de la familia eran posibles donantes luego de diversos intentos que fracasaron por completo. Robert no lo dudó y se sometió al quirófano por la mujer que lo trajo al mundo y contó: «Su vida corría peligro, su estómago se estaba llenando de agua y era cuestión de días… En el momento en que supe que todas las demás opciones estaban agotadas, empaqué mis cosas y volé a Estambul. Mi misión era clara, curar a mi madre. Todo lo demás era menos importante o completamente sin importancia».

A los 22 años tuvo que dejar su carrera a un costado y ahora a sus 23 está listo para volver a jugar. Tras varios meses de recuperación, ella continúa con el tratamiento mientras que él se prepara para regresar a las canchas. «Todos mis hallazgos son normales, el hígado se regeneró casi por completo dos meses después de la cirugía”, contó. ​

Tras haberle salvado la vida a su madre está listo para afrontar una nueva temporada  y concluyó: “Me siento muy bien, estoy lleno de motivación, estoy de mejor humor que nunca. Lo que me pasó me fortaleció y realmente siento que estoy listo para grandes cosas. Podría jugar los primeros minutos el próximo fin de semana”.

TOMADO DE DIARIO OLÉ