La revelación generó un fuerte impacto. El periodista Nelson Castro, autor de «La salud de Diego: la verdadera historia», contó que el cuerpo de Diego Armando Maradona fue enterrado sin su corazón, en medio de las autopsias para determinar las causas de su fallecimiento. Lo mismo pasó con el hígado y los riñones. Ahora, a poco del primer aniversario de su muerte, se confirmó dónde quedaron sus órganos.

Según informa el sitio 0221.com.ar, están en el Departamento de Anatomía Patológica de la Policía Bonaerense en la ciudad de La Plata, cerca del estadio Juan Carmelo Zerillo, la última casa de Maradona como técnico de Gimnasia.

La Justicia decidió que los órganos permanezcan en La Plata para su estudio y conservación. Según trascendió, la idea es que estén en formol por los próximos diez años.

El 2 de diciembre de 2020, siete días después del fallecimiento del astro, sus órganos fueron trasladados a la dependencia de la Superintendencia Científica de la Policía Bonaerense, en plena investigación de las causas de su muerte.