Una vez que Fernando Rapallini indicó el final del primer tiempo del partido entre River y Racing, Marcelo Gallardo se acercó al cuarto árbitro, Ariel Penel. Se venía quejando y su voz se escuchó claramente: «¿Vos no lo podés ayudar? Dejá, yo te lo anoto. Si no no le dan velocidad al juego. Pará que voy a anotar. Pero la puta madre…».

El Muñeco sostenía que Rapallini demoraba la reactivación del juego cuando debía anotar un amonestado. Es una actitud habitual del DT pedir agilidad y esta vez les tocó a los árbitros en vez de sus jugadores…

TOMADO DE DIARIO OLÉ