Todo el tiempo, todos los días, hay un recuerdo que mantiene viva la esencia de Diego Armando Maradona. Pelusa partió físicamente el 25 de noviembre pasado, pero su historia se encarga constantemente de mantenerlo presente a cada rato.

Hoy se cumplen 40 años de su debut oficial con la camiseta de Boca Juniors, el club de sus amores. Aquel 22 de febrero de 1981, el Diez salía por el túnel y se encontraba cara a cara con la multitud que esperaba para verlo brillar en el césped de la Bombonera.

El Xeneize goleó 4-1 a Talleres de Córdoba y Diego se dio el lujo de anotar dos goles, ambos de penal. Miguel Ángel Brindisi, su gran socio durante esa temporada, también marcó por duplicado. El amor quedaba sellado para la eternidad, pero lo mejor estaba por venir.

Primero como jugador, después como hincha. Maradona no dejaría de ir nunca al estadio Alberto J. Armando, el lugar en donde vivió varias de las alegrías más grandes de su frenética vida. Boca y Maradona, Maradona y Boca: un sentimiento inagotable.

TOMADO DE DIARIO AS