Fernanda Vásconez, fundadora del Club Ñañas y una de las jugadoras que más promueve el fútbol femenino en nuestro país, fue entrevistada esta mañana por LA RADIO REDONDA y reveló una anécdota muy interesante, que servirá de lección para quienes no confían en las chicas para este deporte.
«Justo en Alemania, estábamos en un festival. Habían afuera de los estadios como ferias. Había una fila enorme. Para patear había un tablero con huecos. Si entraba el balón, ganabas un premio; y si no, fallabas y te ibas», contó.
Luego, prosiguió: «Después de eso, tenías un arco con un arquero de segunda categoría de allá, pero era profesional. Y va un niño a patear y este arquero se la tapa. Entonces voy yo. El arquero se me arrodilla. Y le dije ‘párate que voy a patear’. Y él me dice ‘no, para que sea más justo'».
«Ni siquiera quería meter gol, quería darle un balonazo. Yo no entré una vez a la selección de mi colegio, porque yo no sabía de patear. Yo tuve que aprender. Ahora sé patear, porque me dediqué a eso muchos años», expresó.
«Entonces le pegué al balón y se fue al ángulo. Fue un golazo. Cojo el balón de nuevo y le dije ‘bueno, ¿quieres volver a taparme?’. Y para que sea más justo, le volví a patear, pero descalza. Así somos las mujeres, debemos demostrar», recordó Vásconez.
Finalmente, la futbolista apreció el apoyo de profesionales y aficionados en este tiempo. «El mayor apoyo que he recibido muchas veces ha sido de hombres, y estoy muy agradecida por eso», sentenció.
Nota de: Víctor Loor Bonilla
