Loris Karius, alemán, fue protagonista de otro gran error en su carrera con su club actual. Por fortuna para Besiktas, el partido era amistoso y empataron por 2-2 contra Altinordu.

El portero recibió un centro de su rival que no tenía mucho peligro, pero finalmente el alemán no logró contener el esférico y volvió a marcar autogol, siendo gran responsable de este nuevo tanto.

El portero del cuadro turco reaccionó contra él mismo, haciendo un gesto con las manos de decepción. Por fortuna fue en amistoso, pero este tipo de errores hunde cada vez más al exportero del Liverpool.