Quines no conozcan a Josep Maria Minguella , sepan que estamos hablando de un señor que, cuando ejercía como representante, intermedió decisivamente para que, entre otros muchos, futbolistas como Maradona Rivaldo Stoichkov Romario acabaran firmando por el Barcelona. Ahora, jubilado, es comentarista de radio y televisión, articulista en MD, golfista amateur, jugador de dominó ‘profesional’, cinéfilo importante y, a ratos perdidos, hasta tiene tiempo de echarle una mano a su hijo que, siguiendo el negocio familiar, es agente FIFA.

Minguella , mientras desmenuzaba el Barça-Olympiacos, contó el miércoles en la Cope algo que ya había explicado antes. Que en mayo avisó al Barça de que Neymar se iba a marchar al PSG y que no le hicieron caso al entender que, de ser cierta la oferta francesa, acabarían convenciéndole, como el año pasado, para que se quedara. Naturalmente, a base de mejorarle un contrato que acababan de renovarle.