Wayne Rooney y el Everton lograron una valiosa victoria en sus aspiraciones ante el Bournemouth, sin embargo, los reflectores se los llevó el exfutbolsita del Manchester United, quien recibió un duro codazo en el área que el árbitro no marcó.

Al minuto 33 Rooney se plantó en el área rival para recibir un centro por derecha, sin embargo, cuando intentó cabecear el balón, el inglés Simon Francis le dio un codazo que dejó tirado al delantero.

Wayne se quedó unos instantes en el suelo, pero unos segundos después se levantó para reclamarle al árbitro por no marcar un evidente penal. Tras el incidente tuvo que abandonar el campo con el ojo ensangrentado y una evidente molestia por la jugada.

El inglés logró continuar después de ser atendido por los médicos del club, y al minuto 55 fue sustituido en el triunfo que consiguió el Everton de 2-1 ante el Bournemouth en la Premier League.