Dos futbolistas de la selección de Irán podría ser suspendidos por haber jugado un partido con su club contra un equipo israelí por la Europa League. Se trata de Masoud Shojaei y Ehsan Hajsafi, jugadores del Panionios de Grecia, quienes fueron amenazados con sanciones tras jugar contra el Maccabi Tel-Aviv la semana pasada.

Hajsafi y Shojaei se habían negado a jugar el partido de ida en Israel, pero sí jugaron los 90 minutos del partido de vuelta en Atenas. Ambos encuentros terminaron con victoria 1-0 del Maccabi Tel-Aviv, que accedió a la siguiente fase de la competición continental.

Según un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, los iraníes que jueguen en conjuntos extranjeros están obligados a incluir cláusulas en sus contratos que indiquen que no pueden enfrentar clubes israelíes. Además, tanto el Ministerio de Deportes como la Federación de Fútbol de Irán (FFI) se mostraron muy críticos con Shojaei y Hajsafi.

Aunque todavía no tomaron ninguna decisión concreta, los dos futbolistas podrían ser suspendidos o incluso excluidos de la selección nacional, que ya está clasificada para jugar el próximo año la Copa del Mundo en Rusia.

Desde hace 38 años, los deportistas iraníes tienen prohibido competir contra sus pares israelíes vista la hostilidad entre ambas naciones, que no tienen relaciones diplomáticas. En el equipo nacional, no obstante, ambos futbolistas tienen un peso importante: Masoud Shojaei es el capitán y Ehsan Hajsafi es un jugador clave, lo que podría servirles en definitiva para evitar un castigo.

Irán, que lidera el Grupo A de las Eliminatorias de Asia con 20 puntos, se enfrentará a fin de mes contra Corea del Sur, en calidad de visitante.