El centrocampista del Arsenal, Mathieu Flamini, ha sido noticia reciente a nivel internacional y no por motivos futbolísticos. El jugador francés reveló que lleva invirtiendo ocho años en la compañía energética GF Biochemicals, de la que es cofundador y que ejerce como pionera en la investigación y producción del ácido levulínico, una molécula con potencial para sustituir al petróleo como fuente de energía.

“Ni siquiera mi familia sabía nada de esto. Mis padres se preocuparon cuando se enteraron hace un año y ahora es cuando se sienten orgullosos”, aseguró Flamini en la presentación en sociedad del producto estrella de la empresa, cuyo valor podría estimarse en torno a los 30 mil millones de dólares.

“Cuando me trasladé a Milán en 2008 (para jugar en el AC Milan) conocí a Pascuale Granate, quien se convirtió en un amigo cercano y siempre quisimos hacer algo juntos. Siempre me sentí muy cercano a la naturaleza y el medio ambiente, y me preocupan el cambio climático y el calentamiento global. Él estaba en la misma sintonía que yo y ambos nos preguntábamos cómo podríamos contribuir a solucionar el problema”, explicó el futbolista.

“Pasado un tiempo supimos de la existencia del ácido levulínico, que ha sido identificado por el Departamento de Energía de los Estados Unidos como una de las doce moléculas con potencial real para suplantar al petróleo en todas sus formas de energía”, prosiguió Flamini.

Y sobre esas ideas hicieron realidad una empresa que cuenta ya con cuatro centenares de empleados, ochenta de los cuales se encuentran trabajando en la sede italiana de Caserta. Ya solo con estos ingredientes, el jugador galo se ha convertido en una de las figuras más excepcionales del fútbol internacional.