Las cámaras de beIN Sports captaron a Cristiano Ronaldo furioso por tener que pasar el control antidóping tras el PSG-Madrid de Champions, que acabó con empate a cero y en el que él no pudo marcar ni marcar la diferencia.

“¡Siempre yo, hombre, siempre yo!”, exclama el crack ‘merengue’ cuando, nada más al entrar en el túnel de vestuarios del Parque de los Príncipes, es abordado por el doctor del Ximo Mas, que le indica que debe someterse a la prueba a instancias de la UEFA.

Cristiano, que en el tramo final del partido de la tercera jornada de la Liguilla fue abrazado por un espontáneo que saltó al campo y llegó a él sin que los empleados de seguridad pudieran darle caza, no se saludó con ningún jugador del conjunto parisino después del pitido final y se marchó serio y cabizbajo.

“¿Son siempre los mismos o qué?”, espetó también CR7, visiblemente irritado porque las cosas no le habían salido como él quería.