Leo Messi finiquitó a lo grande en el Sánchez Pizjuán el gafe que le perseguía en Andalucía esta temporada. Tras lesionarse en los campos de Almería y Betis, se resarció en su regreso a Sevilla ofreciendo su versión más genuina.

La de ese asesino en serie con un balón en los pies que destroza a sus rivales hasta el último minuto a base de goles y jugadones sólo al alcance de un elegido como él.

Algo más adelantado que en partidos precedentes y con Andrés Iniesta como inestimable aliado para definir arriba con la precisión que le había faltado últimamente, Leo ha vuelto. Y, vistas sus celebraciones enrabietadas en los tantos que obraron la remontada para recuperar el liderato, es para quedarse.

El devorador de récords multiplicó exponencialmente su confianza con un doblete que elevó a 18 su cifra de goles contra el Sevilla, los mismos que ha metido al Real Madrid. Sólo el Atlético (20) les supera en su particular lista de víctimas. En una cita en que había que ganar sí o sí, Messi respondió a las expectativas quedándose con sus dos tantos a tiro de los registros de tres mitos.

A cuatro meses y medio de cumplir los 27 años en pleno Mundial de Brasil, la mirada asesina de Leo avista ya a Telmo Zarra, Raúl González y Alfredo di Stéfano.

Es el ‘hat trick’ que puede llegar en cuestión de días. El primero, leyenda del Athletic, es el máximo goleador de club en la historia del fútbol español con 335 dianas en 354 encuentros oficiales disputados con el equipo de San Mamés.

Messi suma 334 en 404 compromisos con el Barça en todas las competiciones. Le basta con ver puerta mañana en Anoeta, uno de los estadios que peor se le da (un gol en cuatro visitas), para dar caza al mortífero ariete nacido en Erandio en 1931 y fallecido en Bilbao en 2006 a los 85 años.

Si además remata con su tercer doblete en esta edición de la Copa del Rey el pase a su cuarta final en seis años, ya no habrá nadie con tantos goles como él con lacamiseta de un club español.

A inicio de temporada ya se cargó a Raúl, autor de 323 tantos con el Real Madrid en 741 compromisos oficiales. De todos ellos, 228 los metió en 550 encuentros de Liga. Uno menos logró Di Stéfano en 329 presencias ligueras entre el club blanco (216 en 282) y el Espanyol (11 en 47).

La ‘Saeta Rubia’ comparte de momento con Messi el honor de ser el máximo goleador (18) en la historia de los enfrentamientos entre Barça y Madrid pero este mismo sábado podría ver cómo su compatriota le pasa por delante en el ránking realizador de Primera División.

El Rayo Vallecano, al que Leo ha endosado siete dianas en cinco duelos, puede ser víctima del insaciable hambre de un genio que demostró en Sevilla no haber perdido la pasión días después de que Ángel Cappa lo diera por hecho.

Con 226 goles en 262 partidos de Liga, Messi figura en el quinto lugar de la tabla pero puede llegar a la ida ante el Manchester City del próximo martes instalado ya en el podio.

A ocho de Hugo Sánchez

Sólo le faltará ya desbancar a Hugo Sánchez (234 goles en 347), algo que en condiciones normales ocurrirá en las 15 jornadas restantes, y nuevamente a Zarra (251 en 277).

Sólo éste (0,90 tantos por partido) mejora el promedio de Leo (0,86), a quien le faltan 25 para ser el número uno. Batir el récord en este curso es casi imposible pero acabará cayendo como fruta madura más pronto que tarde.