Al volante Ángel Di María no le gustó nada que los hinchas del Madrid lo silbaran cuando era reemplazado por Gareth Bale y reaccionó de la peor manera: agarrándose los testículos de cara a una de las plateas del Bernabéu.

El inapropiado gesto en el partido ante el Celta dejó al argentino en el ojo de la tormenta. ¿Habrá sanción de parte de la dirigencia?