El Chelsea se impuso con soltura y brillantez al Southampton gracias a una buena segunda parte. Fernando Torres se reencontró con el gol y los cambios que hizo Mourinho le funcionó a las mil maravillas. El segundo gol lo hizo Willian.
El partido comenzó como si de un petardo de mecha corta se tratase. En apenas 4 minutos, Fernando Torres quiso demostrar a Mourinho, y de paso a Vicente del Bosque que está en un estado de forma bastante decente.
Tres ocasiones se fabricó el de Fuenlabrada, pero le faltó, lo más importante. Una vez por acierto del portero Davis, otra por su mala puntería y otra por las dos a la vez. El delantero hizo una extraordinaria primera parte pero le faltó el gol.
Pero el petardo, se mojó sobre la intensa lluvia de Southampton y fue el equipo local a base de la caraja defensiva de los blues, los que metieron el miedo en el cuerpo a los de Mourinho. Pero sólo fue eso, miedo. Porque ni Lallana, ni Ramírez y tampoco Rodríguez consiguieron meter el esférico en la jaula. Tras varios minutos de zozobra, el partido entró en una espiral de patadones sin sentido y bien pudo ahorrarse el árbitro los últimos quince minutos de la primera parte. Fue un castigo durísimo para el espectador.
El Chelsea de Mourinho acostumbra a hacer este tipo de partidos una y otra vez. Una primera parte sin sobresaltos para meterle algo más de pólvora a la segunda mitad.
La segunda parte comenzó como empezó el partido. Con el Chelsea completamente desbocado y con unas ganas tremendas de llevarse los tres puntos. Torres de nuevo era una pesadilla y se asociaba con Hazard a las mil maravillas. Mourinho decidió mover el banquillo y mata fue el principal sacrificado. El asturiano parece estar lejos de su mejor versión y Mourinho no es hombre de dar dos oportunidades.
Oscar que entró por mata protagonizó la jugada tonta de la jornada. Mano a mano con Davis, se marcha a las mil maravillas del portero y cuando la tenía que empujar, decidió tirarse al suelo para buscar el penalti y la expulsión. De regalo, se llevó la tarjeta amarilla.
Fue entonces cuando, como cada partido, el Chelsea terminó de espabilar y llegó el gol. Oscar disparó y tocó en el defensa y el balón se estrellaba en el palo. Torres que merodeaba por allí puso la cabeza y marcó el gol. Los delanteros ‘blues’ llevaban un año y un mes sin ver puerta fuera de casa. Es el tercer gol del madrileño , que parece estar muy enchufado en esta fase de la temporada.
El Chelsea, metió otra marcha más y el gol se veía venir hasta que llegó. Oscar, otra vez por banda le cedió un caramelo a Willian fusiló la portería.
Diez minutos después, Oscar que revolucionó el partido, marcaba el tercero tras un pase sublime de Hazard. La línea de tres mediapuntas que tiene el Chelsea está llamada a grandes cosas. Talento y magia. Los últimos minutos sirvieron para ver como se gustaba el Chelsea y sobre todo Hazard.
Con este resultado los de Mourinho se sitúan terceros y con pleno de victorias en este maratón navideño. El equipo de Londres, empieza a engrasar la máquina en los momentos decisivos.
Fuente: Yahoo EuroSport
