En el marco de lo que será el primer choque oficial por la repesca mundialista entre los seleccionados de Nueva Zelanda y Perú, prensa neozelandesa reveló algunos de los detalles más curiosos entorno al encuentro.
Antes que nada, se supo que la Asociación de Fútbol de Nueva Zelanda y la Asociación de Futbolistas Profesionales (NZPFA) prometió un millón de dólares a repartirse entre el plantel y el cuerpo técnico en el caso de cumplirse dos condiciones.
En primer lugar, se exigía el clasificar como primeros en la eliminatoria OFC, accediendo así a un cupo para el repechaje intercontinental que ahora están por disputar y como segunda condición se les impuso en complicidad con la gente el llenar el Westpac Stadium durante el próximo compromiso.
Siendo una cultura marcada por el rugby y con el fútbol recién en pleno proceso de crecimiento, las organizaciones correspondientes se ven forzadas, o mejor dicho motivadas, a incentivar a su público a participar de los encuentros que juegan los All Whites.
Lejos de ser un rival de fácil acceso, Perú deberá prestar especial atención a sus figuras, quienes se desempeñan en el fútbol de Europa y considerar también que cada miembro del equipo rival se encuentra bajo una considerable motivación económica, superior a la del primer millón que estarían a punto de embolsarse.
