La gala de FIFA The Best 2025 ya tiene claros favoritos y todo apunta a que Aitana Bonmatí y Ousmane Dembélé serán los grandes protagonistas este martes en Doha (Qatar). Según informó Mundo Deportivo, ambos parten como los principales candidatos para llevarse el premio a Mejor Jugadora y Mejor Jugador del año, en una ceremonia sobria que se realizará en el marco de una cena, a pocas horas de la final de la Copa Intercontinental entre el Paris Saint-Germain y Flamengo.
En el apartado masculino, Dembélé llegará a la capital qatarí con el galardón prácticamente asegurado, apenas tres meses después de haber conquistado su primer Balón de Oro. A diferencia de ese premio, otorgado únicamente por periodistas, el FIFA The Best se define con el voto conjunto de entrenadores y capitanes de las selecciones nacionales, un factor que refuerza aún más la candidatura del extremo francés tras su brillante temporada.
En la categoría de entrenadores, Luis Enrique aparece como el máximo favorito luego de comandar el histórico triplete del PSG. En la nómina también destaca Hansi Flick, quien logró Liga, Copa y Supercopa con el FC Barcelona, aunque parte un escalón por detrás del técnico español. Entre los arqueros, Gianluigi Donnarumma encabeza las preferencias, con Wojciech Szczęsny también nominado, mientras que en el fútbol femenino la española Cata Coll figura entre las candidatas, en una categoría donde Hannah Hampton (Chelsea) y Ann-Katrin Berger (Gotham) aparecen con fuerza.
En el fútbol femenino, además, Sarina Wiegman es la gran favorita para quedarse con el premio a Mejor Entrenadora, tras llevar a Inglaterra al título de la Eurocopa, superando a España en la final. Su consistencia en torneos internacionales vuelve a colocarla en la cima de las quinielas.
La gala también tendrá presencia ecuatoriana de alto nivel. Moisés Caicedo y Willian Pacho han sido nominados al Mejor XI FIFPRO, un reconocimiento que los ubica entre los futbolistas más destacados del mundo en sus posiciones. La inclusión de ambos confirma el gran momento del fútbol ecuatoriano en la élite internacional y eleva las expectativas de cara a una ceremonia que promete nombres propios y récords históricos.