El que tiró la bomba fue Arnaldo Mancilla, técnico del club boliviano Huanuni de la ciudad de Oruro. El entrenador argentino prendió el ventilador: "No son todos, pero estamos ante un grupo de gente enferma. Incluso, metieron prostitutas en el hotel". Escuchalo.
El que tiró la bomba fue Arnaldo Mancilla, técnico del club boliviano Huanuni de la ciudad de Oruro. El entrenador argentino prendió el ventilador: "No son todos, pero estamos ante un grupo de gente enferma. Incluso, metieron prostitutas en el hotel". Escuchalo.
Al club Empresa Minera Huanuni no le fue muy bien en la Copa Bolivia. El equipo, perteneciente a la Asociación de Fútbol de la ciudad de Oruro, acaba de quedar eliminado en dicho torneo clasificatorio para el campeonato Simón Bolívar. Y su entrenador, el argentino Arnaldo Mancilla, decidió sacar los trapitos al sol. "Tengo un plantel de alcohólicos. Si hay gente que no puede abstenerse seis días de consumir alcohol, estamos ante un grupo de gente enferma", disparó el DT en un reportaje concedido al programa radial Máxima Energía.
Enojado, el Chini Mancilla (reconocido ex jugador de San José de Oruro a fines de los 80 y principios de los 90) no se quedó en esa acusación para explicar los malos resultados del equipo. "Raúl Maciel, Héctor Chácon, Junior Acuña, Ulises Vargas y Ricardo Sambueza no cometieron ninguna falta disciplinaria. Son los pocos que se salvan, pero el resto deja mucho que desear", contó, mencionando a los que sí se comportaron como profesionales. Como si no alcanzara la mancha que le impregnó a los otros integrantes del plantel, el entrenador dio nombres: "Algunos jugadores se creen grandes, pero son grandes enfermos. Son tipos enfermos que recorren los clubes de Bolivia como el caso de Alvaro Zuleta, de José Reyes y de Jorge Escalera. Estuvieron en el plantel sin mi consentimiento pero con el aval del vicepresidente del club que no sé qué arreglos tendrá con ellos. Como supuestamente no había dinero para traer jugadores, los acepté en el plantel pero yo sabía que en cualquier momento iban a tener algún acto de indisciplina porque están acostumbrados a eso".
Para cerrar, y lejos de bajar los decibeles, Mancilla dobló la apuesta y mencionó otro incidente extrafutbolístico. "Además de sus borracheras, estos jugadores ingresaron prostitutas al alojamiento donde estábamos hospedados", agregó, avisando que él no se hará cargo del fracaso deportivo.