Eden Hazard se resiste a caer en el olvido del madridismo y, por extensión, del resto del mundo del fútbol. El belga prometió en Cibeles que traerá de vuelta su mejor versión: “Llegué hace tres años, pero pasó la lesión, muchas cosas… ¡El próximo año voy a dar todo por vosotros!”. Este martes en la concentración con Bélgica ha comparecido ante los medios y ha querido profundizar en el asunto: “Quiero demostrar que mi carrera todavía no se ha terminado”.
Unas palabras que amplían lo que podría sonar a intención buenista en Cibeles, producto de la efusividad de una fiesta por la celebración de una Champions, es un deseo del que se viene hablando internamente en el Real Madrid. También con el propio 7 blanco, que apuesta por seguir en Chamartín. Una vez el pasado 29 de marzo se le retiró la placa de titanio del maltrecho y tantas veces conflictivo tobillo derecho, unida al peroné, Hazard empezó a ir avanzando mucho mejor incluso de lo esperado. La temporada parecía perdida, pero el atacante logró la luz verde definitiva antes de la penúltima jornada contra el Cádiz. Al belga se le veía en los entrenamientos más cercanos a ese viaje a la Tacita de Plata físicamente como nunca desde que fichó.
Pero faltaba la prueba definitiva, ver cómo se desarrollaba mentalmente en un partido, donde los contactos no son tan controlados como en Valdebebas. Esa jugada polémica con Akapo fue significativa. El cadista se llevó un taco clavado del belga que le causó sangre, pero el propio Hazard también recibió lo suyo en la misma acción, con un fuerte traumatismo causado por la bota del rival. Pero era la prueba definitiva. El Hazard temeroso de otros retornos, que seguía notando cosas extrañas en el tobillo, al fin parecía alejarse.
Sabe que aún genera dudas
Hazard es consciente de su situación y de las dudas que sigue generando. En la conferencia de Prensa, admite que está “decepcionado” por cómo ha ido su periplo en el Madrid. “Iba a ser la guinda del pastel y me he pasado un año y medio o dos con dolor en el tobillo”, admite, aunque con optimismo: “Me siento mejor otra vez y sé que si llego al nivel aún puedo dar mucho”. Por eso habló este martes en Bélgica y por eso tomó el micrófono en la celebración, sabiendo la repercusión que iban a tener sus palabras. La entidad lo valora, porque cree que la última palabra con un fichaje que costó 100M€ más bonus no está aún dicha.
Hazard se quedó en apenas 903’ este curso recién terminado, pero aún tiene 31 años y contrato hasta 2024. El mal final del culebrón Mbappé ha sido bueno para el tiempo de juego de Vinicius pero también del belga. El Madrid, de hecho, piensa en Hazard para que sea competencia directa de Vini, con Rodrygo desde la derecha. A diferencia de Bale, el Madrid cree que sí puede salvar al soldado Hazard.
TOMADO DE DIARIO AS