El martes por la noche, el presidenteย Bartomeuย declarรณ en El Partidazo deย Copeย que elย Barรงaย no se planteaba aceptar ninguna oferta sobreย Coutinhoย por muy buena que fuese la propuesta. El miรฉrcoles, despuรฉs del partido de Copa contra el Madrid, fueย Valverdeย quien mostrรณ el mรกximo apoyo al futbolista mรกs caro de los historia del club: 160 millones de razones que obligar a hacer todo y mรกs para recuperarle.
Philippeย habรญa vuelto a jugar mal. El virus de la languidez se ha apoderado de รฉl y en el club entienden que para vencerlo no hay mejor tratamiento que transmitirle, inyectarle toda la confianza que el futbolista parece haber perdido. Se la hado el presidente, el entrenador,ย Eric Abidal,ย Messiย (dejรกndole tirar el penalti contra elย Sevilla) y se la dan sus compaรฑeros, peroย Coutinhoย no arranca.
La preocupaciรณn, para que vamos a andarnos con remilgos, es mรกxima. El brasileรฑo ha entrado en el bucle del ir de mal en peor y no hay manera de que salga ni tampoco de sacarle de ahรญ. El problema se encuentra en una cuestiรณn anรญmica que, por lo que sea, el chico no logra remontarla. Complicada situaciรณn, porque mientras รฉl se estanca, crecen los colegas que compiten con รฉl por un puesto en el titular.
Valverde, llegados a este punto en el que el calendario exige la mejor versiรณn de cada uno de sus jugadores, es el prรณximo afectado por una situaciรณn que de rebote le lleva a estar entre la espada y la pared. ยฟCรณmo seguir dรกndole confianza aย Coutinhoย si eso puede implicar dejar en el banquillo aย Dembรฉlรฉย y/oย Malcomย que estรกn ganรกndose el puesto mientras su compaรฑero lo pierde? Difรญcil escenario. Un bucle del queย Philippenecesita salir mรกs pronto que tarde. Lo necesita รฉl y lo necesita elย Barรงa.