Tras su breve paso por el fútbol saudí, Ivan Rakitic regresa a Europa procedente del Al-Shabab, en el que únicamente estuvo tres meses después de abandonar el Sevilla. No es una vuelta cualquiera, sino a su Croacia natal al Hajduk Split por un año más otro opcional, donde no había tenido la oportunidad de jugar como futbolista profesional.

Inicio su trayectoria profesional en el Basilea, y después de fichar por el Schalke 04 en 2007, firmo por el Sevilla en el mercado de invierno de 2011, tras rendir a un gran nivel en el club alemán. En la capital andaluza, se convirtió en héroe, especialmente con Unai Emery en el banquillo, con el que ofreció su mejor versión y fue clave en la Europa League de 2014, donde fue el mejor jugador de la final ante el Benfica. Ese verano, firmaba 5 temporadas con el Barcelona.

En el Barcelona, logró el triplete en su primera temporada con Luis Enrique al mano, abriendo el marcador en la final de la Champions League ante la Juventus. Con los blaugranas, cuatro ligas, cuatro Copas del Rey y dos Supercopas de España, una Champions League, una Supercopa de Europa y un Mundial de Clubes antes de regresar a su Sevilla.

Con la perdida de protagonismo en el Barcelona, no dudo de volver al Sevilla, con la promesa de homenajear su amigo José Antonio Reyes llevando su mítico dorsal 10: «Si fuera posible sería algo muy especial y para mí un orgullo poder de esta manera darle un homenaje a mi gran amigo. Sería bonito, por supuesto…» Con los de Nervión, disputo cuatro temporadas en su segunda etapa, viviendo su mejor momento en Budapest, en 2023, cuando consiguió su segunda Europa League tras vencer en la tanda de penaltis a la Roma.

Después de agrandar su leyenda en la capital andaluza, ha tenido un breve paso por el fútbol saudí, tres meses en el Al-Shabab, antes de regresar a su país para firmar un año más otro opcional por el Hajduk Split, en su primera experiencia como futbolista en su país natal.

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