La jugada que en el minuto 104 del Real Madrid-Bayern Munich de la vuelta de la semifinal de la Champions League desató la polémica sobre el terreno de juego, ha tenido su eco en los medios alemanes, que lamentan que el polaco Marciniak anulara la jugada del gol de De Ligt por fuera de juego a instancias del linier y sin dejar acabar la jugada.

«En el momento del disparo (de De Ligt) Marciniak hizo sonar su silbato. ¿Fuera de juego? El asistente Listkiewicz izó la bandera. En lugar de dejar que la jugada continúe, el árbitro priva al Bayern de la posibilidad de empatar y así prolongar el partido. ¡Qué escándalo!», escribe ‘SportBild’, el principal medio deportivo del país.

Max Eberl, director deportivo del Bayern, calificó la jugada de «muy extraña y dudosa. El árbitro pita antes del disparo de De Ligt, por lo que el VAR ya no puede intervenir. Luego reconoció su error. ¡Pero no podemos comprar una mierda con eso! Todos estábamos a favor de una final alemana. ¡Todos excepto los árbitros polacos!», dijo en alusión a los árbitros.

Una pesadilla de la que no despertar‘, titula por su parte ‘Der Spiegel’. El rotativo alemán señala al árbitro: ‘Fue polémico y centró la atención‘. También culpan al meta Neuer, que si bien tuvo sensacionales paradas, «cometió un extraño error«, en el gol de Vinicius, dicen. Kimmich tampoco salió bien parado de las críticas.

‘Der Spiegel’ analiza así la polémica jugada: «En las imágenes de televisión no quedó claro si había fuera de juego. Por qué Marciniak no dejó que la jugada continuara para que el VAR la analizara más tarde generó interrogantes y enfado, y no sólo en el Bayern».

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO