Tras el partido de vuelta de los octavos de final de la Champions League en el Santiago Bernabéu entre el Real Madrid y el Leipzig, Jude Bellingham atendió a los micrófonos de ‘Prime Video Italia’… y tras terminar la entrevista, donde se analizó primero el partido, la divertida anécdota viene cuando la periodista Alessia Tarquinio le lanza una petición personal para que el futbolista le ayude con su hijo. Tras el mensaje directo de Jude, la periodista lanzó una propuesta ‘indecente’ sobre si quería irse a su casa porque «es el hijo perfecto», pero esto lo dijo demasiado tarde ya que el jugador lo malinterpretó y se quedó perplejo.

El 5 del Real Madrid se ha convertido en una especie de educador del hijo de la periodista italiana que cubre los partidos del conjunto blanco desde España. Basta dar un paso atrás y recordar el partido entre Nápoles y Real Madrid. En esa circunstancia el problema era de comportamiento de su hijo pequeño: «Le pregunté si podía decirle algo a mi hijo que a veces no se porta tan bien y me dijo: ‘tienes que ser amable con tu madre porque las madres son importantes para nosotros'». Una pequeña escena que llevó a Alessia Tarquinio a volver a bromear con el jugador para conseguir su cometido: «Tengo una última pregunta para ti… «¿puedes decirle a mi hijo que haga sus deberes en español?». El inglés miró a la cámara y volvió a lanzar un mensaje personalizado.

«Gabriel, haz tus deberes en español… o de lo contrario vas acabar como yo sin hablar mucho español», bromeó el inglés. «Uso privado de Jude Bellingham, no es norma. Le he pedido esto porque la última vez me ayudó y porque aprender español es importante», respondía la periodista antes de lanzar una petición que descolocó al futbolista por completo: «¿Quieres venir a casa conmigo?». El inglés reaccionó asombrado y entonces llegó ayuda de casa: «Mira que estamos en un terreno peligroso…», trataban de quitar tensión al asunto desde el plató de televisión. Luego concluyó sin saber casi donde meterse: «Es como el hijo perfecto, por eso lo decía. Se ha malinterpretado todo».

FUENTE: MARCA.