Consternación en el mundo del atletismo. Este domingo, cerca de la medianoche, se ha anunciado la muerte del plusmarquista de maratón, Kelvin Kiptum, a la edad de 24 años. Según la información adelantada por los medios kenianos, su país natal, la tragedia se produjo en un accidente de tráfico que también involucró a su entrenador, el ruandés Gervais Hakizimana. Kiptum, llamado por muchos a rebajar la histórica barrera de las dos horas en la distancia de Filípedes, se adjudicó el mencionado récord mundial en la maratón de Chicago del año pasado, parando el cronómetro en 2:00:35.

Según las primeras informaciones, publicadas por el medio The Standard Digital, la tragedia se produjo en la carretera que une la zona en la que nació, Eldoret, con Kaptagat, en la Valle del Rift, donde viven y entrenan muchos de los mejores maratonianos del planeta. La hora del accidente se sitúa alrededor de las 23:00 horas (hora local en Kenia), según el comandante de policía de Elgeyo Marakwet, Peter Mulinge, que también informó que el coche, un Toyota Premio, lo conducía el atleta.

Kiptum, nacido el 2 de diciembre de 1999 en Chepkorio, se presentó al mundo del atletismo en la Maratón de Valencia de 2022, en la que, siendo un gran desconocido para el gran público, logró la tercera mejor marca de siempre, sólo por detrás de Eliud Kipchoge y Kenenisa Bekele. En Chicago, en el que tan solo era su tercer maratón, reescribió la historia de la distancia: fue el primer corredor en romper la barrera de dos horas y un minuto, yendo a una media marciana de 2:50 el kilómetro y 21,240 km/h. Antes, también ganó en Londres, su otro major, cruzando la meta en 2:01:25. En el horizonte, estaba llamado a protagonizar unas de las carreras del siglo con el propio Kipchoge en los Juegos Olímpicos de París, en los que hubiera competido por primera vez representando a su país.

“Mi mente está en París 2024. Es mi sueño, siempre tuve como gran aspiración competir en los Juegos y espero tener la oportunidad de representar a mi país”, expresó Kiptum tras lograr la hazaña en Chicago. El keniano, llamado a ser una figura legendaria, tenía sus tres marcas hasta el momento entre las siete mejores de todos los tiempos. En Valencia, además, con un crono de 2:01:53, firmó el mejor tiempo de la distancia para un debutante. Fue el inicio de una carrera exageradamente prometedora que se ha apagado demasiado pronto.

TOMADO DE DIARIO AS