El Manchester City se coronó como campeón del mundo a nivel de clubes al golear por 4-0 al Fluminense en la final que se jugó en Arabia Saudita.
Y esto pese a que en el equipo de Pep Guardiola no estuvieron Erling Haaland y Kevin de Bruyne por lesiones.
Su reemplazo, Julián Álvarez abrió la lata al minuto del partido y luego un autogol de Nino, otro tanto de Foden y el doblete de Álvarez, sellaron la goleada.
Sudamérica tendrá que seguir esperando, ya que la última vez que un club de CONMEBOL ganó el torneo fue el Corinthians en 2012.
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