Tom Lockyer, capitán del Luton Town que sufrió un paro cardíaco el pasado sábado, abandonó este miércoles el hospital y comenzará un periodo de recuperación en su casa.

Según informó el Luton Town, este martes se implantó un desfibrilador cardioversor (ICD, por sus siglas en inglés) al jugador de 28 años para «evitar que se repita el incidente del pasado sábado».

El equipo confirmó que la operación fue un éxito y que el futbolista ha podido dejar el hospital para continuar la recuperación en su casa.

«El club, Tom y su familia le gustaría aprovechar esta oportunidad para repetir los agradecimiento al Bournemouth, a sus aficionados, a los árbitros, al cuerpo médico y al centrocampista Philip Billing, que fue el primero en ayudar a Tom en el campo», dijo el Luton en un comunicado.

Lockyer ya sufrió un problema cardíaco en la final del ‘playoff’ de ascenso en mayo y, según el Luton, las recomendaciones que recibieron en aquellos momentos llegaron de los «más importantes cardiólogos» y que el episodio sufrido la pasada semana fue diferente.

TEXTO TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO