Zlatan Ibrahimovic se retiró del fútbol profesional a final de la temporada pasada, pero ahora podría regresar al Milan con otro rol. El exfutbolista sueco es una leyenda del club, tanto por lo que aportó dentro del campo como por lo que representa su figura.

En 2020, su vuelta ya significó un antes y un después para el club. En ese momento, Ibra mejoró mucho la situación gracias a sus goles y a su mentalidad. Se erigió como el líder del grupo, llevando a los jóvenes a otro nivel. En el mundo del fútbol lidiar con la presión es fundamental, y él en eso es un fuera de serie. Cargó con su mochila y descargó la de los demás para un año después volver a conquistar la Serie A.

El inicio de temporada había sido ilusionante, liderando la clasificación durante varias jornadas y desplegando un buen juego. Sin embargo, las dudas se han adueñado del equipo, generando falta de confianza hasta en el Rafael Leao, la estrella. De cinco partidos han ganado uno, han empatado dos y han perdido otros dos. En el campeonato doméstico la situación sigue siendo buena, a 3 puntos del Inter. En Champions es bastante más compleja, últimos de grupo y obligados a ganar al PSG el próximo martes (21h).

Stefano Pioli sobre la posibilidad de que vuelva: «Estamos estructurados para apoyar al entrenador y a los jugadores, así que ya sabéis cuánto quiero a Zlatan. No habría ningún problema, ningún problema en caso de que Zlatan decidiera volver aquí». Su papel, entre otras funciones sería el de aportar experiencia, liderazgo, calma y gen ganador, a un grupo que le idolatra.

TEXTO TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO