El PSG tiene prisa, mucha prisa en vender a Mbappé. Además por el hecho de que no quiera que el jugador se marche gratis en junio de 2024, tampoco está por la labor de pagar 40 millones a un futbolista que ha apartado y que sigue en sus trece de continuar este año en París para irse libre en 2024.

Esos 40 millones forman parte de los famosos bonus de fidelidad que el PSG y Mbappé firmaron en 2021, cuando el jugador decidió renovar con el equipo parisino y no ir al Real Madrid, cuando parecía que iba a ser jugador del club blanco. Mbappé ya ha cobrado 70 millones por el primer bonus, el del año pasado y si se queda hasta el final de esta temporada, cobraría 80, de los que la mitad los cobraría ahora. Hay otro bonus de fidelidad en el caso de que Mbappé siguiera hasta 2025. Un bonus que sería de 90 millones de euros.

El próximo 31 de julio, el PSG debe pagarle esos 40 millones y de ahí que tenga prisa en venderlo antes de esa fecha que, por otro lado, es el próximo lunes. Mbappé, por su parte, no tiene ninguna prisa en salir del PSG y no está por la labor de renunciar a esos 40 millones de euros y, por lo visto, a los otros 40 que percibiría por estar esta temporada en el PSG.

Así están las cosas entre el club y el jugador, con las posiciones totalmente opuestas. El PSG, con prisa para venderlo cuando antes y Mbappé, firme en su idea de seguir en París hasta junio de 2024.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO