Ronaldo Nazario se puede haber metido en un gran berengenal mientras hay algunos dudan de sus gestiones al frente del Valladolid Cruzeiro. Como una de las mayores leyendas del fútbol brasileño, cuando se pronuncia todo el mundo escucha aunque sea para pegar un palo o advertencia a la metodología de su país.

Para ejemplificar lo que quería decir acerca del problema formativo existente en Brasil, Ronaldo tomó a Vinicius, uno de los mejores jugadores del mundo en la actualidad, como ejemplo. «Ni le preparaon bien ni mejoraron sus fundamentos técnicos. ¡No sabía controlar el balón con la izquierda! Hoy, tras crecer en España, es el atacante más determinante del fútbol mundial», señaló Ronaldo en una entrevista al pódcast Mano a mano.

El problema de fondo es la pobre metodología que, según el ex del Real Madrid, tienen en Brasil. «Llegó a Europa sin afinar, todavía en formación», insistió Ronaldo, que como le pasó a él «durante muchos años los talentos que se marcharon fueron diamantes sin pulir. El de Vinicius es un caso claro. Fue vendido al Madrid con 18 años y empezó en el Castilla. Veías que todavía no estaba hecho, hasta el punto de que todo el mundo decía que iba a ser cedido hasta que regresara a Brasil. Ha pasado del agua al vino en dos años, pero cuando fichó… Y eso que jugaba en el Flamengo. No le entrenaron de forma correcta, porque no mejoraron su pierna izquierda ni su relación espacio-tiempo en el campo. Sólo mejoró fuera de aquí».

Unas declaraciones que Ronaldo es consciente de que igual no gustan en su país. «Hoy tenemos, sólo en Primera, a diez entrenadores de fuera. Están mejor preparados que los brasileños. Sé que me criticarán por eso, porque pensarán que soy antipatriota y que prefiero a los extranjeros, pero no es eso. Creo que hay que contratar a los mejores», incidió ‘O Fenomeno’, que sin ir más lejos en su Cruzeiro eligió a Paulo Pezzolano como su primer entrenador y, acto seguido, a Pepa, de Portugal.  «Brasil dará un salto de calidad en cinco o seis años. Ya se han empezado a hacer cursos de coaching y metodología, la CBF ha invertido mucho en ello. Es algo de lo que no se habla mucho, tal vez incluso porque su imagen está un poco dañada, pero esto va a cambiar el nivel del fútbol de nuestro país, tanto en la formación de entrenadores como en programas de base», insiste.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO