La visita de Jorge Messi al domicilio de Joan Laporta y sus declaraciones posteriores elevaron la moral de los culés partidarios del regreso de Leo (35 años). Jorge fue claro: dijo que su hijo prioriza regresar al Barça por encima de otras opciones más lucrativas como la de Arabia o más cómodas como la de Miami.

Sin embargo, esas palabras no quieren decir que sea fácil el regreso del crack argentino. Ni mucho menos. El Barça está en una situación complicada y no es fácil articular una oferta en la línea de lo que exige LaLiga. Leo incluso jugaría por una cantidad simbólica, pero la patronal no lo permite. De ahí la idea del club de pagarle un euro más que a Lewandowski como ficha. Pero eso requiere un proceso y puede que no sea corto. Y Leo quiere decidir cuanto antes.

El argentino nota mucha presión encima, son muchos meses hablándose de su futuro, con contínuos rumores e informaciones que lo sitúan, casi al mismo tiempo, con un acuerdo cerrado con diferentes clubs. El caso es que Messi quiere decidir más pronto que tarde y quitarse ese peso de encima. En este sentido, el Barça está en inferioridad con las ofertas del Al-Hilal y el Inter de Miami, más estructuradas que la propuesta del Barça, al no ser una oferta formal porque el club sigue pendiente de cómo liberar masa salarial.

Leo vivió un trauma fuerte con su salida del Barça y con su precipitada llegada a París. Su primer año allí fue complicado a nivel deportivo, personal e incluso familiar. Se tiró cuatro meses en un hotel con su mujer y sus hijos y el encaje deportivo no fue sencillo en el PSG. Además, aquel verano estuvo en vilo hasta el 5 de agosto, cuando se le cayó el castillo de naipes de su renovación con el Barça. No quiere otro verano de incertidumbre.

Sigue amando al Barça, su padre ha recuperado la relación con Laporta y valora los esfuerzos del club. Pero no quiere estar en tensión mucho tiempo más. Por eso, su entorno admite que ahora lo de fichar por el club azulgrana no es fácil ni está tan cerca como algunos lo pintan. Es lo que hay, guste o no a Messi y al Barça.

Ahora lo que queda es conocer la decisión del crack, si decide aceptar ya alguna oferta de las que tiene, con el Al-Hilal apretando fuerte y Miami a la estela, o si apuesta por el Barça, a pesar de la falta de garantías a nivel de oferta forma, algo que incrementaría la presión sobre él.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO