La Juventus jugará la próxima temporada en la Conference League… si la UEFA no acaba sancionándole por el ‘Caso Plusvalías’. Un mal menor para el histórico club turinés tras una temporada para olvidar que ha vivido instalado en una montaña rusa de emociones como consecuencia de la deducción de 15 puntos que al final han quedado en diez.

Tenía la Juventus en la última jornada de la Serie A la posibilidad de acabar entrando en la Europa League. Cumplió ganando al Udinese (0-1) pero se mantuvo en el séptimo lugar de la tabla ya que la Roma venció in extremis al Spezia (2-1), gracias a un penalti de Paulo Dybala, acabó sexta y se clasificó para la segunda competición continental junto al Atalanta (5º tras su 5-2 al Monza)

La Juve dominó a un Udinese que no se jugaba nada, pero sin pegada. En la primera parte la mejor de sus contadas ocasiones fue a balón parado, su principal recurso. Arkadiusz Milik prolongó un córner botado por Federico Chiesa y Leonardo Bonucci, también con la testa, cabeceó al larguero (31′).

Tras el descanso, viendo que su equipo necesitaba un revulsivo, Massimiliano Allegri dio entrada a la media hora a Ángel Di María y no tardó la Juve enmarcar, aunque el gol fue obra de Chiesa tras recibir solo de Manuel Locatelli y poner el balón junto al poste con una ajustada rosca (68′).

Segundos después un trallazo de Sandi Lovric obligó a Wojciech Szczesny a esforzarse para desviar un obús por raso que se colaba (70′). Era el primer remate del Udinese y en el segundo el meta polaco sacó otro chut envenenado de Nehuén Pérez (84′).

La Juve tuvo también sus ocasiones y acabó logrando un triunfo que no le sirve para ir a la Europa League. El colofón que resume  una temporada surrealista.

TEXTO TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO