La Federación Italiana de Fútbol (FIGC) indultó este sábado a Romelu Lukaku, delantero del Inter, «de manera excepcional y extraordinaria» y retiró la segunda tarjeta amarilla que vio en el partido ante la Juventus, correspondiente a la ida de semifinales de Coppa Italia, por celebrar el gol del empate (1-1) mandando callar a la grada que le había proferido insultos racistas.
Pese a que el Tribunal de Apelaciones de la FIGC desestimó el recurso que el Inter presentó esta semana, el presidente de la Federación Italiana, Gabriele Gravina, llevó a cabo el indulto.
«El principio de lucha contra toda forma de racismo es un elemento fundador del orden deportivo», este es el motivo del presidente para permitir competir al ariete en el choque de vuelta.
Todo llega tras una semana convulsa en lo referido al tema ya que el mismo Tribunal de Apelaciones que desestimó el recurso de Lukaku aceptó el que presentó el Juventus por la sanción recibida de cerrar el sector que profirió dichos insultos durante un jornada.
El Inter emitió este viernes un comunicado protestando contra lo que consideraron dos medidas injustas.
«El Inter de Milán siente que debe renovar su cercanía y apoyo a su jugador y expresa su gran disgusto al reconocer que la víctima se ha convertido en el único culpable», lamentó el club milanés.
El belga podrá, por tanto, estar disponible para la vuelta del miércoles en San Siro en el que será el partido decisivo (1-1 en la ida) para alcanzar la final de la Coppa Italia.
TEXTO TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO
