La Sampdoria vive una situación muy difícil tanto a nivel institucional como deportiva (al borde del descenso) y este sábado, junto a la Liga Serie A, denunció en un comunicado que varios de sus dirigentes han recibido amenazas. Massimo Ferrero, presidente de la Samp, y su adjunto, Antonio Romei, recibieron además en la sede del club una caja con una cabeza de cerdo y una nota pidiendo la cabeza de ambos. “Presidente Massimo Ferrero y su adjunto Antonio Romei, vuestras cabezas serán las próximas”, decía la hoja que llegó a la sede de la histórica Sampdoria.

La Sampdoria, penúltima en la tabla de la Serie A (además a 8 puntos de la salvación), afirmó en un comunicado: “La Sampdoria expresa profunda indignación ante el enésimo acto de intimidación grave ocurrido esta mañana en el domicilio social de Piazza Borgo Pila. El club subraya que cualquier tipo de ataque a un miembro de la Junta Directiva representa un ataque a todos sus miembros, a su trabajo ya la seriedad y abnegación con que abordaron esta importante tarea”.

El club sampdoriano añadió: “Desde su nombramiento, el BoD ha funcionado con cohesión, unidad de propósito e independencia con el único objetivo de asegurar la continuidad de la actividad empresarial y deportiva de la Sampdoria a la espera de la transición a la nueva propiedad. Precisamente en esta dirección, es fundamental la profesionalidad y preparación del vicepresidente Antonio Romei, con quien la Junta espera poder seguir compartiendo esta delicada etapa en la vida del club”.

La situación está convulsa en lo institucional debido a la mala situación deportiva. En la Serie A, la Sampdoria está en la penúltima plaza, muy alejados de los puestos de salvación. Los dirigentes han fichado a Jesé para intentar voltear la situación ya que van abocados a la Serie B.

TEXTO TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO