En el Real Madrid, el nombre de Casemiro es el que más se ha escuchado durante toda la semana, como es normal. El brasileño, a falta de confirmación oficial, va a dejar el club después de ocho años formando parte de la primera plantilla y lo va a hacer para jugar en el Manchester United.

Los motivos de este movimiento son varios, pero uno de los más pesados, como en todos los fichajes, es el de las cantidades del traspaso. Tanto las que recibe el club que vende como las que recibe el jugador que se va.

Cifras convincentes para todos

En este caso, las cifras que se manejan son las de un fichaje de 60 millones de euros más otros 10 en variables. Un aspecto que podría llegar a otorgar al Real Madrid hasta 70 millones de euros por un jugador de 30 años que hace tiempo que está amortizado.

Y por otro lado, lo que recibe el jugador y que ha sido una de las claves por las cuales se habría podido decidir para dar un paso tan importante en su carrera y hacia una dirección más incierta que la actual, porque a día de hoy el United es un polvorín. Sin embargo, el salario de 22 millones anuales (415.000 euros a la semana) con el que sería el cuarto jugador mejor pagado de la Premier y un contrato de cuatro años más uno opcional, le ha terminado de convencer.

De esta manera, Casemiro pasaría a cobrar prácticamente el doble (ahora cobra unos 11 millones anuales) y lo haría hasta 2026 como mínimo con opción a seguir haciéndolo en 2027 cuando en el Real Madrid tan solo tenía unión hasta 2025.

Así las cosas, en lo deportivo está aún por saber si esta sería una buena operación para todas las partes. Pero en lo económico está claro que tanto el Real Madrid como Casemiro salen ganando. Falta por saber cómo sale el United pero para eso hace falta más tiempo.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO