Después que hace solo unas horas la Premier League diera su aprobación a la venta del Chelsea, ahora es el Gobierno británico quien da el OK. Los 19 años del sancionado Roman Abramovich como propietario del club londinense están más cerca de terminar después de que el Parlamento aprobara la venta de la entidad blue a un consorcio encabezado por el copropietario de los Dodgers de Los Ángeles, Todd Boehly.

Abramovich fue sancionado por sus vínculos con el presidente ruso, Vladimir Putin, y había que comprobar que el oligarca ruso no se beneficiaba de la venta forzosa del club que su inversión convirtió en uno de los más exitosos del fútbol europeo. El club será vendido por 2.500 millones de libras, el precio más alto jamás alcanzado por un equipo deportivo.

El Chelsea ha estado operando bajo una licencia del gobierno desde que se congelaron los activos de Abramovich en marzo y vence el 31 de mayo.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO