La mítica portera del PSG femenino, Stéphanie Labbé, ha decidido detener por un tiempo su carrera a causa de un severo agotamiento mental. Así lo anunciaba en el día de hoy la prensa francesa, que se hacía eco de esta noticia que ha cogido por sorpresa a los aficionados al fútbol femenino.

La guardameta canadiense ya arrastraba problemas relacionados con su salud mental que la alertaron hace tiempo y que le han llevado a retirarse por el momento del deporte de forma prematura durante la temporada tras romper su contrato con el PSG. Había sido fichada el pasado mes de agosto procedente de la Liga de Suecia.

La campeona olímpica de 2021, de 35 años, quiere dar otro rumbo a su vida para preservar su salud mental. Se trata de un tema sobre el que ya habló el pasado otoño, tras el título olímpico ganado en Tokio con Canadá. También se había mostrado siempre muy solidaria con los temas de ansiedad desvelados por Simone Biles y Naomi Osaka.

Afectada por el Covid-19 justo antes del invierno, Labbé se fue de vacaciones a Canadá y ahí se tomó un tiempo de reflexión con sus seres queridos, en especial con su compañera, la ciclista Georgia Simmerling, medallista olímpica en 2016 en Río. A su regreso, el PSG ya se esperaba lo peor, aunque siempre se ha mostrado a su lado.

El PSG pierde a uno de sus grandes baluartes, ya que Labbé fue nombrada una de las tres finalistas del Trofeo ‘The Best’ a las mejores porteras de 2021.

De hecho, ya dio avisos días atrás de su decisión: “El fútbol ha causado algunos de los momentos más oscuros de mi vida”, explicaba con lágrimas en los ojos, en un video publicado el miércoles.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO