Pep Guardiola se ha cruzado en el destino de Haaland. El entrenador del Manchester City ha pedido a su club que haga un esfuerzo definitivo por el delantero noruego, quien por su parte ha dado instrucciones a su agente, Mino Raiola, para que alcance un acuerdo lo antes posible con el Real Madrid.
Los petrodólares del City cambian el escenario, ya que el Real Madrid no puede entrar en una puja directa con el Club/Estado. Tampoco puede afrontar el fichaje de Haaland sin liberar salarios. El ahorro que supondrán las bajas de Bale, Marcelo e Isco, que acaban contrato en junio, servirá para encajar la ficha de Mbappé una vez que se consume su fichaje. Pero para añadir además a Haaland hace falta liberar más espacio en el vértice salarial. La salida de Hazard, que podría servir a ese propósito, es muy complicada. El belga quiere cumplir su contrato y triunfar en el Madrid.
A estas circunstancias se une la insistencia de Pep Guardiola en la contratación de Haaland. El técnico catalán perdió a Agüero y más recientemente a Ferran Torres, con el que contaba como ariete. Se ha quedado con Gabriel Jesús como único especialista. De ahí su insistencia en fichar a Haaland, cuya única incógnita son los 52 días que acumula de baja esta temporada por, directa o indirectamente, una lesión puñetera en el flexor de la cadera.
La única pero gran ventaja del Real Madrid es que Haaland quiere jugar en el nuevo Bernabéu y formar parte, junto a Mbappé, de la resurrección de un equipo galáctico, un bloque como el que tuvo el Real Madrid en la primera década del siglo. Así se lo ha dicho a su agente, Mino Raiola, que ha recuperado la sintonía con los dirigentes del club después de algunos años de relación fría, casi inexistente. Su visita a Valdebebas junto al padre del propio Haaland fue muy valorada por ambos, que llegaron a la capital con el encargo de su representado de tender puentes con el Real Madrid.
TOMADO DE DIARIO AS