En Anfield, se viviría un especial partido, con la vuelta de Steven Gerrard al club de su vida, esta vez como rival, siendo el entrenador del Aston Villa. Los de Jürgen Klopp dominarían todo el encuentro, pero el conjunto villano aguantaría las embestidas de los locales, poniendo tierra de por medio y llegando al entretiempo con empate.

No sería hasta la última media hora de encuentro el momento en el que el marcador se movería. Mohamed Salah cobraría una pena máxima, poniendo el partido de cara para los huéspedes. El gol del egipcio sería suficiente para acumular los 3 puntos y no perder la estela del liderato.

Tomado de fichajes.com