Hay nuevo escándalo en el fútbol colombiano. El superintendente de Industria y Comercio, Andrés Barreto, ha hecho pública una investigación que cursa contra 10 clubes del fútbol profesional colombiano y Dimayor por cuenta de presuntos abusos en el manejo de negociaciones y contratos de jugadores. Lo hizo en una entrevista con Noticias Caracol.

«Este año recibimos una denuncia de Acolfutpro (Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales) y de su apoderado (Carlos González Puche) respecto a que posiblemente hay restricciones a la competencia en el mercado de jugadores fútbol. Eso tiene que ver con varias situaciones. Lo primero, los jugadores para poder jugar necesitan un contrato laboral con el club y también para generar esos espacios existente el mundo de los intermediarios y lo que se llama coloquialmente pases de fútbol. En Colombia, seguramente presentándose una situación muy similar, esta asociación presentó una queja señalando que potencialmente se estaba restringiendo la libertad de los jugadores y (al) ir directamente a negociar con el club su contrato«, explicó.

Además, Barreto abrió la posibilidad de que existan vetos a jugadores que reclaman sus derechos: «Que potencialmente se estaba restringiendo el mercado de los agentes o intermediarios, enviando a unos pocos la posibilidad de ir a negociar en el club. Y una lista negra en la que, si los jugadores quieren ir a negociar el contrato, los vetan para ir a buscar otro equipo y también que si quieren terminarlo por justa causa, digamos que quedan rehenes del club hasta que no les suelten los derechos. Es interesante porque el 26% de los ingresos de los equipos proviene de los pases de los jugadores, así que hay un tema de significatividad».

«Con las evidencias que nos enviaron pudimos constatar tres cosas. Uno, que hay contratos laborales de estos jugadores que traen unas cláusulas que podrían violar la competencia. Dos, que hay un mercado de jugadores que están rehenes de ciertos intermediarios que son los únicos que podrían negociar con los clubes. Tres, jugadores que no quieren estar más en un club o quieren dar por terminado su contrato y no se lo permiten porque los vetan del mercado del fútbol«, profundizó.

El superintendente mencionó algunos de los clubes que estarían involucrados, aunque no todos, y las consecuencias de esta investigación: «10 equipos profesionales y, potencialmente, Dimayor. Ahí están, que recuerde yo, Boyacá Chicó, Tolima, Alianza Petrolera, Envigado y seis más que se me escapan en este momento. Con esta apertura de la investigación, los equipos pueden voluntariamente venir a la autoridad y someterse a un programa de beneficios por colaboración, si es que han violado la ley y quieres aceptar sus cargos (…) Si definitivamente se comprueba su responsabilidad, se lleva el caso a la Junta Asesora de Competencia y allí tomamos la decisión que deriva en la imposición de unas multas, como pasó en el caso de la reventa de boletas«.

Hay que recordar que la gestión de Andrés Barreto fue la encargada de investigar y sancionar a la Federación Colombiana de Fútbol por el escándalo de revnta de entradas para los partidos de la Selección Colombia, tema que todavía está en la lupa y tiene a varios dirigentes en vilo. Estas fueron las palabras del funcionario:

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