Desde que llegó Leo Messi llegó a París el pasado martes, tanto él como su familia se hospedan en el lujoso hotel Le Royal Monceau de París, propiedad de los dueños del PSG, y que está situado a escasos 600 metros del Arco del Triunfo.

Además de ponerse a punto pensando en su debut con el PSG -el argentino se ha entrenado hoy por primera vez en las instalaciones del conjunto galo-, otra de las ocupaciones del argentino, junto a su esposa, Antonela, y sus tres hijos será buscar su nuevo hogar en la capital francesa.

Como sucede con los jugadores del FC Barcelona, que algunos futbolistas apuestan por vivir en la Ciudad Condal, otros cerca de la ciudad deportiva y otros cerca de la playa, en el PSG hay dos lugares donde se concentran la mayor parte de los jugadores de la plantilla.

La mayoría apuesta por decantarse por vivir cerca de París, concretamente en el exclusivo barrio de Neuvilly sur Seine, a solo diez kilómetros del centro, pero algo más retirado de la ciudad deportiva des Loges, situada a algo más de 20 kilómetros. Aquí está ubicado el American Hospital de París, donde Leo pasó la revisión médica, y es el lugar donde residen sus compatriotas Di María y Leandro Paredes. El hándicap para Messi y su familia en este barrio es que apenas podrían tener privacidad.

En cambio, la opción más viable para Messi y su familia sería decantarse por el pueblo donde reside su amigo Neymar. Se trata de la tranquila localidad de Bougival, de solo 9.000 habitantes, y que está a solo 10 minutos de la ciudad deportiva del PSG. Aquí hay opciones de casas rodeadas de jardín y que permiten tener mayor seguridad y privacidad, alejándose además del ruido de la ciudad.

En el caso de Neymar, reside en una casa de 1.000 metros construidos valorada en 6,5 millones de euros, con cinco plantas, ascensor, piscina interior, 5.000 metros de jardín…

Antes del 10 del PSG, en esta localidad ya vivió otro amigo de Messi como es Ronaldinho, quien antes de llegar al Barça jugó en el PSG, o incluso el célebre actor francés Gérard Depardieu.

Aunque no logrará tener las vistas al mar de Castelldefels, si Messi se acaba decantando por esta zona de Bougival, además de tranquilidad, zonas verdes y el río Sena, Messi también podría encontrar algunos de los mejores colegios internacionales donde llevar a sus hijos.

Tiempo tendrá para elegir casa, pero Neymar estaría encantado de tenerlo como vecino en Bougival.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO