Neymar Jr. renovó el pasado sábado con el PSG hasta 2025 y la opción de un posible regreso al Camp Nou quedó totalmente descartada. De entrada, el delantero brasileño no era un futbolista que estuviera en la planificación deportiva de la secretaría técnica azulgrana de cara a la próxima temporada, pero a tenor de la situación del mercado -solo le restaba un año de contrato-, su deseo de volver al Camp Nou para reencontrarse con Messi y su potencial comercial provocaron que el Barça explorara la vía del brasileño.
Neymar, que ya tenía avanzada su renovación con el PSG, hizo saber al Barça que vería con buenos ojos volver a vestir de azulgrana al lado de Leo Messi, uno de sus deseos, tal y como había expresado él mismo públicamente. A partir de ahí, el Barça se movió teniendo claras cuáles eran sus limitaciones económicas y siendo consciente de que cualquier opción de fichar al internacional de la ‘canarinha’ necesariamente implicaría un intercambio de jugadores.
En las últimas semanas el club azulgrana mantuvo varios contactos con Nasser Al-Kelhaïfi, pero en todas las conversaciones el presidente del PSG fue rotundo y contestó: “Neymar no está en venta”. Aún así, a priori, Neymar parecía dispuesto a esperar al Barça y, en esas condiciones, el club azulgrana hubiera estado dispuesto a plantearse la operación, que necesariamente tendría que ir hasta finales del mercado de verano, pues a estas alturas, y con muchas otras prioridades antes, como la renovación de Leo Messi, la refinanciación de la deuda o la salida y rebaja de la ficha de jugadores, era inviable que el Barça pudiera acometer el fichaje de Neymar ahora.
Ante esta situación, y pese a que de inicio el brasileño había mostrado su disposición a aguantar, finalmente Neymar avisó días atrás que optaba por renovar por el PSG, con el que ya tenía todo pactado a falta solo de la firma.
Después del culebrón que se vivió en verano de 2019, cuando el Barça estuvo negociando hasta el último día del mercado con el PSG su traspaso, Neymar acabó por desdecirse de su palabra dado que esta vez no estaba por la labor de vivir un episodio igual y decidió no esperar al Barça y renovar por el PSG. Pese a la falta de palabra, el Barça no se siente ofendido y seguirá con su plan inicial sin Ney.
TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO
