Neymar , si vuelve, será en 2022 cuando haya terminado su contrato con el PSG. Si antes renueva por el club francés, su deseo de volver al Camp Nou se desvanecerá para siempre. En 2019, cuando el Barça puso todo de su parte ( Todibo Rakitic Dembélé y 100 millones) para traerle de vuelta y satisfacer a la plantilla que le quería aquí, el PSG siempre pidió algo más. Era su forma de decir que no. Como siempre. Tito Vilanova quiso a Thiago Silva y no pudo ser. El pretendido Marquinhos , tampoco. No a Verratti a pesar de haberse fotografiado ya con una portada de Mundo Deportivo donde se hablaba de una cumbre por su futuro. Luego, con Rabiot , pasó lo mismo. A pesar de que su madre-representante y el Barça estaban de acuerdo, el PSG se negó al traspaso.

Precisamente, durante esas negociaciones, alguien desde París deslizó a los negociadores Abidal Segura los motivos por los que el PSG no potenciaría nunca al Barça. Les insinuaron que tenían instrucciones que llegaban desde Qatar de no hacer operaciones con el Barça. Consideraban que, con el patrocinio de la camiseta (primero Qatar Foundation, luego Qatar Airways) habían ayudado mucho al club y, a cambio, sólo habían recibido críticas por ser una dictadura, donde se maltrataba a la mujer y se aprovechaban de los inmigrantes. Dolidos o no, la realidad es que el PSG no ha permitido cerrar ninguna operación con el Barça.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO