Javier Burrai, cancerbero de Barcelona Sporting Club, conversó con el periodista Eduardo Andino para DESALINEADOS acerca del títulos de los amarillos obtenido en Casa Blanca luego de vencer a Liga de Quito en los penales.

«Escribimos una página importante en el club, es lo que realmente importa y va a quedar en el club. Me alegra haber ayudado en la historia del equipo», destacó el portero del ‘Ídolo del Ecuador’.

Respecto a cómo se prepararon antes del duelo final, manifestó: «La preparación fue buena, concentramos post Navidad. Hubo una cena con cuerpo técnico y dirigentes. Se preparó todo el partido. Liga tuvo, en general, un año mejor que el nuestro. Fue una final pareja igual y terminó como terminó».

«Más importante que quebrar el invicto, lo que importaba era ser campeón. Díaz y Oyola son los que llevan adelante al equipo, son los más experimentados», añadió el arquero argentino de 30 años de edad.

Reveló que sí practicaron la tanda. «Un día antes practicamos todos los penales. Yo sí estudié a los rivales, aunque a Piovi no lo tenía visto; me decían a dónde la podía patear Marcos Caicedo. Borja fue difícil, la tomé en el momento. Porque de 8 penales que vi, 4 fue a un lado y 4 al otro», indicó.

Finalmente, del sueño que tuvo antes del partido, Burrai sentenció: «Toda la semana previa sabía que si él pateaba el penal, se lo iba a atajar (risas). Sentía que sí se lo iba a tapar. Cuando él apoyó la pelota, yo ya sabía a dónde me iba a lanzar y decía ‘es ahora, viejo (su papá)’. Me alegra que dimos una alegría a gran parte del país; después de un año muy malo (por el tema COVI-19), fue una caricia».

Nota de: Víctor Loor Bonilla